Central Córdoba de Rosario le ganó a Berazategui por 4 a 1 en el Gabino Sosa, por la fecha 7 del campeonato apertura de la Primera C. David Cornejo fue el árbitro del encuentro.
El primer tramo del partido fue más que parejo, ya que ambos equipos buscaban ganar la mitad de cancha y de esa manera agilizar el juego de cada uno. Pero el trámite se volvió trabado y con mucha pierna fuerte.
La tónica del encuentro se mantuvo de esa manera hasta que apareció la jugada que rompió el molde. A los 22′ Tomás Ramírez abrió hacia la derecha para Francisco Duré, el lateral se acomodó y lanzó el centro al corazón del área para el cabezazo en globo del volante Gonzalo Gómez, la pelota terminó colándose en el ángulo de Nicolás Rodríguez.

Los de Teglia y Acoglanis no se conformaron con el primer gol, y a los 25′ Pablo Vranjican aprovechó una mala salida de la defensa Naranja, conectó con Ramírez y el 10 comenzó a encarar con pelota al pie, sin dudarlo enganchó y sacó el sablazo de zurda al segundo palo, imposible para el golero Rodríguez. En un abrir y cerrar de ojos, Central Córdoba se puso en ventaja por 2 a 0.
La visita intentó reaccionar rápidamente pero no estuvieron finos no solo en los metros finales, sino que también en la generación de juego. De esta manera finalizó la primera parte de un partido que era parejo, pero un cabezazo y un truco de magia del número diez rompió la paridad.
El inicio del complemento no dio respiro y el “Mago” del Charrúa agitó la varita mágica nuevamente, porque a los 3′ y desde un tiro libre sobre la derecha, Tomás Ramírez sacó el zurdazo al ángulo bajo para que la pelota pique antes de la reacción del arquero y finalice en el fondo de la red.
Berazategui no se dio por vencido por más que haya tres goles de diferencia, y con los cambios tácticos por parte del técnico Rodrigo Bilbao fueron en la búsqueda de la épica. A los 13′ del segundo tiempo un centro llovido al área del Charrúa terminó impactando en la mano de Mateo Yaszczuk, por lo que el árbitro del encuentro dictaminó penal. El capitán visitante Pombo se hizo cargo y cambió la sentencia por gol, agregándole picante a un encuentro que parecía liquidado.

Pero al “Mago” Ramírez le quedaba un as bajo la manga, un truco de magia más, una historia que le sobraba por contar, en la tarde de poco sol rezagado que ya se hallaba en el Gabino Sosa. A los 25′ de la segunda mitad y nuevamente desde un tiro libre, esta vez rozando la medialuna del área rival, se llenó todo el pie zurdo de futbol para que la pelota ingrese donde anidan las arañas, imposibilitando a Rodríguez cualquier tipo de reacción.
Tras la última obra de arte del diez Charrúa, que se llevó consigo la pelota por el triplete, el equipo controló la pelota hasta el final y cerró la persiana pera el delirio de todo los Matadores que terminaron encantados por el nivel futbolístico demostrado.
En el día que Tomás Felipe “El Trinche” Carlovich cumpliría 79 años, su equipo de toda la vida ganó, gustó y goleó. Y para no ser menos, un tocayo suyo fue la gran figura del partido.
Con esta victoria contundente ante el Naranja, Central Córdoba llegó a la cantidad de 16 puntos compartiendo la punta con J.J. Urquiza, que quedó libre este fin de semana. El próximo miércoles jugará el partido reprogramado de la primera fecha ante El Porvenir en el Gabino Sosa a partir de las 19.