Central Córdoba de Rosario venció ayer en la tanda de penales a Gimnasia por 5 a 4 tras empatar 1 a 1 en los 90′ correspondientes en San Nicolás, por los 16avos de final de la Copa Argentina. El árbitro del encuentro fue Luis Lobo Medina.
El primer tiempo entre ambos equipos fue demasiado parejo, el Lobo Platense jamás hizo sentir la diferencia de categoría y el Charrúa no se achicó en ningún momento, tornando el juego de ida y vuelta pero sin tantas jugadas claras de gol.
Durante el complemento y a medida que iban pasando los minutos, comenzó a notarse una merma física de los jugadores del Matador; no solo por la cantidad de partidos que viene acumulando el plantel, sino que también la jerarquía y categoría de Gimnasia comenzó a llevar las riendas del juego.

Gimnasia fue acercándose al arco de Ignacio Colombo con disparos de Piedrahita a los 11′ y a los 22′ de la segunda parte, pero llegado los 24′ Juan de Dios Pintado desde la derecha lanzó un gran centro y Bautista Merlini de cabeza rompió con el cero del marcador.
Rápidamente el equipo dirigido por la dupla Teglia-Acoglanis fue en búsqueda del milagro, potenciado con los cambios que le dio aire fresco a la mitad de cancha y con un poco de amor propio. El equipo de Tablada, con el rival de primera división defendiendo cada pelota como si fuera la última, buscó todas las maneras posibles de generarle peligro al golero Insfrán, pero faltaba precisión en la tocada final.

Hasta que a los 44′ del segundo tiempo, Tomás Ramírez desde una pelota parada en la mitad de cancha centró al área, Valentín Rovetto que ingresó en el complemento peinó la pelota al segundo palo y Facundo Marín con su derecha se llenó todo el pie de gol para empatar agónicamente el encuentro e ir a los penales.

En la tanda de penales falló Marín para el Matador, y Castillo para el Tripero, lo que significó un rato más de nervios y sufrimiento. El sexto penal por el lado de Central Córdoba lo pateó Vranjicán que cambió por gol, por lo que el próximo jugador de Gimnasia estaba obligado a convertir. Piedrahita se hizo cargo de esa pelota, pero la gran figura de Ignacio Colombo tenía otras intenciones y le adivinó la intención al jugador tripero, se lanzó hacia su izquierda tapando el disparo y consiguiendo la clasificación a 8vos de final de la Copa Argentina.