Los dirigidos por la dupla Teglia-Acoglanis finalizaron el año de la mejor manera
Central Córdoba de Rosario venció en la tarde de domingo a Victoriano Arenas por 2 a 1 en el estadio Gabino Sosa, en el marco de la última fecha del Clausura de la Primera C. Con los goles de Vranjicán revirtió el resultado y consiguió la tan ansiada clasificación al certamen nacional.
Los de zona sur iniciaron el encuentro con hambre y gloria, pero la falta de precisión en los metros finales le negaban el gol a los del duo Teglia-Acoglanis. A los 27′ del primer tiempo Victoriano encabezó un contragolpe, Ortíz ingresó al área y remató ante la marca de Mario Senra, la pelota pegó en el defensor Charrúa y el rebote le quedó a Duarte para que de primera saque un derechazo esquinado, imposible para la inmunidad de Ignacio Colombo.
El gol de la visita significó un baldazo de agua fría para el conjunto local, no tuvo respuestas futbolísticas para empatarlo y se fue al entretiempo con el temor de que el sueño copero no se haga realidad.
Con el empate parcial de J.J. Urquiza ante Berazategui aún dependía de sí mismo, y con esa motivación el equipo salió al campo de juego. El Charrúa empató rápidamente a los 47′ tras un gran centro de Duré al primer palo y un cabezazo formidable de Pablo Vranjicán.
El Matador no se quedó atrás y fue a buscar la victoria, ya que a esta altura del partido Berazategui le ganaba a su par de Urquiza, necesitaba un gol más para asegurarse la clasificación. A los 66′ llegó ese grito sagrado, tras una gran jugada colectiva en el que participaron Madero y Fernández, Marín filtró un gran pase para que Vranjicán quede mano a mano y defina de excelente manera al primer palo. El Gabino Sosa explotó y se transformó en una fiesta.
Central Córdoba supo aguantar el resultado, se cerró bien atrás y ganó uno de los partidos más importantes del año. Urquiza perdió y el Charrúa consiguió lo que tanto añoraba, la merecida clasificación a la Copa Argentina 2025.