El prócer de Rosario Central fue hospitalizado de urgencia
Omar Arnaldo Palma de 66 años sufrió un accidente cardiovascular este lunes y se encuentra en estado crítico en el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria. Por su complicado estado evalúan trasladarlo al Hospital Centenario para intervenirlo quirúrgicamente.
El fútbol argentino se encuentra en vilo tras conocerse la delicada situación de salud de Omar Arnaldo Palma, uno de los máximos ídolos de Rosario Central, quien sufrió un accidente cerebrovascular (ACV) hemorrágico este lunes por la mañana. El “Negro”, como lo apodan cariñosamente, fue internado de urgencia en el Hospital Eva Perón de Granadero Baigorria y luego trasladado al Hospital Italiano de Rosario, donde permanece en estado de coma y bajo estricta observación médica.
Un ídolo en lucha
Palma se encontraba en su casa en Ybarlucea, al noroeste de Rosario, cuando sufrió la descompensación mientras compartía mates. Según informaron medios locales, una de sus hijas fue quien llamó a la ambulancia que lo trasladó inmediatamente al hospital. Los primeros estudios confirmaron el diagnóstico de un ACV hemorrágico, lo que requirió su traslado a Rosario, donde ingresó en terapia intensiva. Su estado es crítico y los médicos trabajan intensamente para estabilizarlo.
La noticia conmocionó a toda la comunidad futbolística, en especial a los hinchas de Rosario Central, club donde Palma es considerado una verdadera leyenda. Su imagen siempre vinculada al club de Arroyito, ya sea dentro del campo de juego o acompañando las divisiones juveniles, lo mantuvo presente en el corazón de los fanáticos. Apenas el último sábado, el exfutbolista estuvo en la Ciudad Deportiva de Central, observando los partidos de las inferiores en el clásico ante Newell’s, compartiendo momentos con figuras como Miguel Ángel Russo, José “Coco” Pascuttini y Gonzalo Belloso.
El legado de Omar Palma en el fútbol es enorme. Su debut con la camiseta de Rosario Central se produjo en 1979 y rápidamente dejó su huella, conquistando el Nacional 1980. Pero su consagración como ídolo absoluto llegó al coronarse campeón del Campeonato de Primera División 1986/87 y de la Copa Conmebol en 1995, títulos que lo consolidaron como uno de los máximos referentes en la historia del club.
Aunque Palma también dejó su marca fuera de Arroyito, especialmente en su paso por Colón de Santa Fe, River Plate y Veracruz de México, su vínculo con Rosario Central siempre fue el más profundo. En River, vivió uno de los superclásicos más recordados del fútbol argentino. Fue en la temporada 1987/1988, donde tras errar un penal con el partido 0-2 en favor de Boca, se tomó revancha y anotó el gol que sellaría la remontada 3-2 para el Millonario.
Tras su retiro, el “Negro” siguió vinculado a Central, llegando a ser entrenador del primer equipo en 2011, durante su paso por la B Nacional, donde tuvo un rendimiento irregular. Además de su trayectoria futbolística, Omar Palma incursionó en la política, ocupando el cargo de presidente comunal de Ybarlucea entre 2005 y 2009.
Hoy, Rosario Central y el mundo del fútbol en general se unen en cadena de oración por la pronta recuperación de un hombre que hizo vibrar a miles de hinchas con su magia en el césped. Palma está enfrentando el partido más difícil de su vida, y la esperanza de todo un pueblo futbolero es que el ídolo pueda salir adelante y sumar una nueva victoria a su impresionante trayectoria.
Los mensajes de apoyo de excompañeros, figuras del fútbol argentino y de los propios hinchas de Central no han tardado en llegar. Todos esperan con ansiedad un parte médico que traiga buenas noticias sobre la salud de uno de los grandes referentes del fútbol rosarino.
